Me enamore de ti, de esos ojos café, de esa sonrisa angelical, de esa mirada tan especial y no hablar de esos sentimientos que guardas muy adentro de ti, que es lo que te hace en mi corazón tan particular. No sé cómo explicar, lo que en mi siento cuando te tengo cerca, creo que puedo empezar con que me quedo sin aliento, porque no puedo creer que en el mundo todavía queda un hombre como tú. Me haces sentir única, protegida, simplemente como princesa. Todo andaba perfecto, como un cuento que solo se crea en sueños.
De la nada, una mañana cambiaste, no me explico como ni el porqué, solo se, que ni deseabas hablarme, porque ni mis mensajes contestaste. Desesperadamente deseaba buscarte, pero no encontraba la manera de como comenzar. Porque sabía que si te hallaba, te iba a empezar a cuestionar, cosas que no tenían lógica, ya que todavía no me pertenecías. Pues guarde la calma hasta el día que me devolverías la llamada.
Pase noches sin saber de ti. Sin saber cómo estabas, como te sentías, solo quería una llamada, para saber si me extrañabas. Solo eso. Porque no entiendo, que me pasaba, cada día que corría más te quería. Tu voz necesitaba escuchar, aunque fuese un hola como estas. Solo me dedicaba a escribirte, dedicarte cosas, a ver si de esa forma percibías que me hacías falta. Aun así, vivía en ignorancia por ti.
Los días pasaron, y por fin recibí la llamada tan esperada, me dijiste que te hallabas bien, pero algo se sentía diferente. Me confesaste lo que pasaba, una piedrita del pasado en el paso del futuro. Pensé que no sería demasiado. Confieso que temí. Pues me dejaste saber cuánto aun la amabas. Pensar que esa noche te confesaría todo lo que por ti sentía, pues guarde silencio y solo te escuchaba. Estuve en esa situación, así que entendía por lo que estabas pasado. En momentos te aconsejaba de lo que debías hacer. Pues aunque me doliera te decía que la buscaras, o tuvieras calma a ver qué pasa.
Sin embargo no aguante, comencé a decirte cosas que no tenían relación , con lo que me contabas. Pues no sabias, que yo te empezaba a querer y todas esas cosas que de mi pasado te guarde, esa noche pudiste entender porque soy esa chica tan tímida que vez. Me dijiste: ” no puedo creer que tú, puedas entender lo que estoy pasado , contigo me siento tan bien. Te considero como la mejor amiga que nunca pude tener.”
Pues no aguante mas y tuve que colgar. Te preocupaste. Sin darme cuenta, te hice sentir fatal. Comenzaste a llamar, pero no encontraba valor para que me escucharas llorar. Deje que pasaran las horas, para poderme calmar y así poderte explicar. Cuando llame, estabas ansioso, por saber cómo me encontraba. Te puse una escusa, pues no era el momento para decirte lo que realmente me pasaba, ya que aun la amabas. Hablamos por largas horas, y de la nada me tuviste que colgar, pues ella en la otra línea te esperaba. Triste deje adiós. Pues tenía que aceptar la realidad de lo que sucedía, que ante tus ojos, era una linda amistad.
Los días han pasado, pero las cosas no han vuelto hacer las mismas desde ese día. Sé que te alejaste de ella. De verdad, que me alegro por ti . Ahora te veo más feliz Un día me comenzaste a buscar pensando que sería tu presa. Pero aun así, no te das cuenta que lo que siento por ti, es más que una linda amistad. Que aunque me veas como amiga, yo a ti te veo como algo mas, difícil de alcanzar.
Hoy me hablaste, con la simpatía, que siempre sueles llevar, sabiendo que me voy en varios días, planeas para venirme a ver. Porque quieres compartir conmigo antes de mi gran partida. Sin embargo, hoy te escribo estas palabras, pues se que no las podre decir, si tu plan suele darse en pie. Amigo te quiero, y no sé porque de ti me fije. Solo sé que , aunque lo tuyo es despecho, no quiero que me utilices de esa manera, ya que lo que siento por ti es mucho más de lo que puedo decir …